Luego de terminada la reunión en la Asociación de Fútbol Argentino, se supo finalmente que no habría modificaciones en la cantidad de descensos para ésta temporada, y que serán tres los equipos que deban jugar en la segunda categoría.
La reunión encabezada por Chiqui Tapia, contó con representantes de todos los clubes, incluído Spinosa, aunque no tenga cargo alguno en Banfield.
En dicha reunión se trató el tema fundamental del campeonato de primera división otra vez a cargo de AFA, con el nombre de Liga Profesional de Fútbol. Si bien el contrato con Superliga sigue vigente, y el próximo fin de semana comenzará la copa de la Superliga, los dirigentes ya tomaron la decisión de que sea la casa madre del fútbol la que se haga cargo de armar el campeonato de primera.
A raíz de la incursión nuevamente de AFA en el armado del torneo, se produjo la renuncia del presidente de la Superliga Mariano Elizondo, y de su vicepresidente Jorge Brito, dirigente de River Plate. Todavía no se sabe cómo va finalizar el vínculo con la Superliga, pero la decisión de los clubes es indeclinable.
En Julio de 2017, la Superliga parecía la solución a todos los males del fútbol argentino. Luego de casi tres años, parece ser el problema mayor de los clubes.
El fútbol argentino sigue sin encontrar el rumbo y sus contradicciones se multiplican día a día.
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